Madrid, 28 may (EFECOM).- Los mercados de futuros de gas iniciaron en abril, de forma inesperada, una escalada de precios que llevaron al mercado de gas de referencia en Europa (TTF) a revalorizarse más de un 12 % en menos de una semana, pero luego se ha estabilizado y ha iniciado una tendencia bajista, según la consultora Ayming.

La consultora de energía ha indicado que en el primer trimestre del año el Brent mantuvo una escalada de precios constantes que llevo al petróleo a revalorizarse un 38 % en los últimos días de abril.

El barril de Brent pasó de los 54 dólares con que inició enero a 75 dólares en los últimos días de abril, marcando máximos desde noviembre de 2018, si bien luego en mayo el precio se ha reducido a 70 dólares.

En paralelo, los mercados de gas, una vez pasados los primeros días de enero, recuperaron la tendencia bajista que iniciaron en octubre, una tónica que se ha mantenido durante el primer trimestre y que ha llevado a los futuros para 2020 desde los 23,5 euros megavatio hora (MWh) a la banda de los 19,5 euros/MWh.

La caída se acentuó en las dos últimas semanas de marzo cuando este índice llegó a cotizar, en momentos puntuales, por debajo de los 18 euros/MWh, lo que supone una corrección de casi el 25 % desde comienzos de octubre.

Este escenario generó en el mercado una oportunidad de compra para los consumidores de gas españoles, pero todo cambió a comienzos de abril, al registrarse una escalada de precios que revalorizó el mercado de futuros un 12 %.

Como consecuencia, gran parte de las empresas que habían decidido formalizar sus contratos para el próximo año detuvieron sus negociaciones a la espera de nuevos acontecimientos.

Desde ese momento, el mercado de futuros se ha estabilizado e iniciado una "tímida" tendencia bajista, que lo ha situado en la banda de entre 19 y 20 euros/MWh, aunque se está corrigiendo de nuevo, según Ayming.

La situación en el mercado de futuros de gas en los últimos días de marzo y primeros de abril supuso para el sector eléctrico español la única oportunidad de compra en 2019.

La electricidad para el tercer trimestre llegó a cotizar a 52,1 euros/MWh, una cotización un 20 % menor que la del mismo periodo en 2018 y también inferior a los 63,5 euros/MWh a los que llegó a cotizar ese contrato a comienzos de 2019.

Además, en los primeros días de abril el precio de las emisiones de CO2, animadas por los especuladores, según Ayming, iniciaron una escalada de precios hasta superar los 27 euros por tonelada, frente a los 22 euros en los que iniciaron el mes, un cambio de tendencia que se contagió al gas natural y el carbón.

En el mercado español, se tradujo en una subida en la cotización para el tercer trimestre de casi 7 euros/MWh, hasta los 59,5 euros/MWh.

El mercado diario eléctrico rompió la tendencia bajista iniciada en octubre y fue un 3 % más caro en abril que en marzo, un 18 % más que en abril de 2018 y un 38 % superior al promedio de los meses de abril de los últimos cinco años.

Ese incremento registrado en abril, afectado por la reanudación del impuesto a la generación eléctrica y el precio del CO2, podría haber sido superior si la aportación eólica no hubiera sido un 5 % mayor a la de abril del año pasado y la demanda un 2 % inferior. EFECOM