«Somos lo que pensamos, todo lo que somos surge de nuestros pensamientos, con nuestros pensamientos creamos el mundo»
BUDA GAUTAMA (Monje sabio)
Los niños, adolescentes y jóvenes que hoy estudian en nuestras aulas, pronto estarán configurando el mundo y dirigiendo nuestra sociedad. Es nuestra responsabilidad darles una educación holística, de calidad y creativa, que despierte el interés por construir el conocimiento, entusiasmarse por saber, y alejarse de las cargas de la educación del siglo XIX que todavía se arrastran.
Entendemos por aprendizaje el resultado de experiencias realizadas para retener cierta información, y luego ser capaz de utilizarla de manera práctica en la vida real. Los alumnos aprehenden mejor cuando encuentran sentido a lo que hacen, o tienen la necesidad de hacerlo para poder realizar sus actividades. Es un proceso a través del cual se modifican y adquieren habilidades, destrezas, conceptos, actitudes y valores.
El aprendizaje creativo es connatural al ser humano y para alcanzarlo se requiere acción, entusiasmo y pasión; cuando se tiene ilusión por aprehender, surgen del corazón ciertos impulsos que enriquecen la vida. El alumno que dirige su propio aprendizaje reconoce que es capaz de producir ideas propias, e incluso que puede llegar a trascenderlas. Veamos sus secretos.
¿Tus alumnos se sienten satisfechos en clase?
Para practicar el aprendizaje creativo los alumnos deben sentirse satisfechos realizando las tareas escolares. En este estado emocional surge fácilmente la motivación intrínseca, que activa la función del hipocampo, segregando dopamina, la hormona del placer. Sabemos que la motivación aumenta cuando ocurren cosas nuevas e inesperadas. La motivación intrínseca es mucho más fuerte que las recompensas extrínsecas.
El primer paso que debe dar el docente para descubrir los secretos del aprendizaje es enseñarles a dominar la capacidad de retener cierta información relevante. Se trata de un proceso que consta de tres momentos: el primero que consiste en observar y analizar con detalle el contenido del texto; en el segundo se pretende relacionar esta información con aquello que ya se conoce y finalmente, aplicar lo aprendido a situaciones del mundo real.
Los secretos del aprendizaje creativo se fundamentan en experiencias diseñadas con el modelo biofílico, de tal forma que contemple proyectos relacionados con lo atractivo de la naturaleza, el amor a la vida y el bienestar del cuerpo. La identidad humana depende, en cierto modo, de la energía física, mental, emocional, energética y creativa que nos aporta el entorno, siendo el más poderoso elixir de salud para el cuerpo, la mente y el alma.
¿Tus alumnos se sienten orgullosos de lo que aprehenden en clase?
Uno de los secretos mejor guardados es que cada alumno y alumna deben construir su propio aprendizaje y sentirse orgulloso del trabajo que realiza. El resultado dependerá de su talento y de su capacidad para captar la realidad, en función de la lupa de su propia percepción. Ellos tienen la responsabilidad de adquirir el compromiso, sentirse implicado y estar motivado para conectarse con su proyecto vital.
Cada alumno tiene su ritmo particular de aprendizaje creativo, que el docente debe respetar: unos serán capaces de interiorizar y vivenciar lo aprendido, mientras otros se conformarán con experimentar meras sensaciones sensoriales. Cuando se domina el aprendizaje creativo, se viven experiencias enriquecedoras, tanto intelectuales, como emocionales y sociales; ello permite conectar con la naturaleza y la energía cósmica.
Las expectativas que se crean influyen decisivamente en el aprendizaje creativo, así como la atención e intención empleado en el proceso. Es urgente repensar cómo enseñar, cómo aprehender y cómo crear contextos autotélicos, para que los alumnos se sientan orgullosos de sus experiencias de aprendizaje. La velocidad y profundidad de los cambios se han acelerado de tal modo que nos exigen vivir en continuo aprendizaje creativo, más aún, en continua creación de novedad.
¿Tus alumnos se sienten felices en clase?
La felicidad tiene que ver con la energía que brota de nuestros pensamientos, sentimientos y emociones. Somos lo que pensamos, lo que sentimos y lo que hacemos. Se ha demostrado que, sí el alumno se siente feliz y potencia las cualidades del corazón, como mostrar amor a lo que hace, existe la oportunidad de que fluya el aprendizaje creativo. Cuando se hace un esfuerzo intencional en este sentido, los beneficios son inmediatos: eleva la vibración, reduce el estrés, y las posibilidades son ilimitadas, gracias al campo electromagnético que se produce en el entorno.
La auténtica felicidad surge a partir de un estado de paz, armonía y equilibrio interior. Apreciarse uno mismo, a un ser querido, o a un amigo, eleva el nivel de vibración; en este caso, se dispone, rápidamente, una conexión con el corazón. Cuanto mayor sea la capacidad de apreciación, más profunda será esta conexión. Para el aprendizaje creativo es importante la disciplina, pero mucho más la motivación y el deseo.
El aprendizaje creativo es un proceso que debe realizarse en sintonía con el amor, la alegría y la felicidad, que corresponde a la alta frecuencia vibratoria; la baja calidad de energía provocada por el miedo, inseguridad o desamparo, generan rechazo al aprendizaje; el secreto está en detectar las señales intuitivas que fluyen por nuestro interior. Para que cristalice esta modalidad hace falta un impulso mental, más allá del simple deseo, un empeño consciente, que supone una poderosa mezcla entre la consciencia y la inconciencia.
¿Tus alumnos se sienten reconocidos en clase?
Los docentes deben saber que cuando a un alumno se le reconoce su trabajo y, se le valora conscientemente responderá de forma positiva y, aprehenderá con facilidad. Sin embargo, un alumno nervioso o tenso, se comportará mal. La autoestima y la confianza irradian energía y luz para entusiasmarse con el trabajo y ser reconocidos. La obligación o culpabilidad no son buenas razones para aprehender, pues expresan un sentimiento de impotencia.
Otro secreto para mejorar el aprendizaje creativo y evitar la tendencia al olvido, estriba en saber diferenciar aquello que realmente vale la pena retener, y sacar las ideas más importantes y adaptarlas al esquema mental propio de cada alumno. Posteriormente, se cierran los ojos y se intenta reconstruir el mensaje utilizando la imaginación. Recordamos que el cerebro olvida rápidamente lo que no usamos.
Venimos a este mundo a ser feliz, amar, disfrutar y compartir todas las situaciones de la vida. La vida es un lienzo en blanco y cada momento con nuestras creencias, pensamientos, decisiones y actitudes pintamos el paisaje en el que queremos vivir. Todo cuanto conocemos y sabemos no es más que una creación de la mente humana, fruto del aprendizaje creativo.
¿Tus alumnos se sienten creativos en clase?
Cada alumno es creativo a su manera. El sistema creativo interviene en todos los procesos de enseñanza-aprendizaje, de esta forma, ayuda a establecer la coherencia mental, emocional y fisiológica, con el fin de reconstruir, reelaborar y ampliar los conocimientos de forma consciente. Desde un punto de vista neurológico, entendemos por aprendizaje creativo, el arte de saber emplear la energía necesaria para conseguir una conexión nueva de las neuronas. Esta conexión neuronal debe ir acompañada de una emoción capaz de producir vibraciones sincronizadas.
El secreto y el regalo mayor que puede hacer el maestro o profesor es sembrar en cada aprendiz el deseo de aprehender. Más que adquirir conocimientos, está crear la pasión por saber, comprehender y enriquecerse, que será una experiencia que les guiará toda la vida, en la aventura de descubrir la verdad. En la vida de un estudiante cuenta tanto lo que se percibe por los sentidos como lo que no se percibe, pero que existe. Ahora bien, no queremos ser sólo consumidores de lo producido por otros; hoy el desarrollo pasa por aprehender a innovar.
Para que exista aprendizaje creativo es esencial que el docente y el alumno estén en la misma sintonía. Esto ocurre, cuando ambas mentes resuenan, sincronizan y mantienen el equilibrio interior necesario para complementarse. Podemos decir que el maestro y el discípulo están confabulados y están fluyendo en la misma onda.
Si los alumnos, niños, adolescentes o jóvenes,
no tienen acceso al aprendizaje creativo,
no podrán materializar sus sueños.
Para ampliar esta tribuna consultar mis libros:
- • El ADN del aprendizaje creativo. Redescubrir la creatividad como experiencia de vida. Editorial Wolters Kluwer, 2020)